5 ejemplos reales de crecimiento sostenible 

Es un paradigma de gestión en el que los esfuerzos se centran en las necesidades de la población en el presente de forma que se consideren cuáles son las que habrá en un futuro. Un Bachelor en Ciencias Ambientales pone el foco en esta cuestión, concretamente en el crecimiento sostenible. 

¿Qué es el crecimiento sostenible?

Es un movimiento que tiene como objetivo proteger el medio ambiente controlando el crecimiento, el consumo y la contaminación de la población humana. Hay siete 'pilares' del desarrollo sostenible según la ONU, y todos deben estar contemplados en el Plan de Acción ODS de cualquier organización, institución o empresa.

¿Por qué es importante el crecimiento sostenible?

Con el ritmo actual de consumo realizado por los seres humanos, los recursos globales se están agotando a un ritmo alarmante. Esto, por otro lado, genera una enorme huella medioambiental.

El Foro Económico Mundial predice que, para 2030, el mundo habrá agotado todos sus recursos naturales. Esto significa que nuestro planeta no podrá satisfacer las necesidades de las generaciones futuras. La necesidad de lograr un crecimiento sostenible es fundamental para nuestra supervivencia en este planeta.

Es imperativo mantener el crecimiento, ya que contribuye en gran medida al bienestar de las personas y sus comunidades. El crecimiento sostenible proporciona un entorno propicio para generar buenos empleos, inclusión social y oportunidades económicas para todos los segmentos de la sociedad. La idea de sostenibilidad social, pues, gana peso. 

No se trata solo del medio ambiente, sino también de la prosperidad inclusiva. Para el desarrollo sostenible, debemos garantizar que todos los sectores trabajen juntos.

Los actores del desarrollo sostenible

El crecimiento sostenible consiste en integrar los objetivos sociales, económicos y ambientales de una manera que garantice que el desarrollo beneficie a todos los países, las personas y el medio ambiente.

Con este fin, los estados miembros de la ONU acordaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que incluye 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, que se alcanzarán para el 2030. Estos objetivos son universales y se aplican a todos los países, desarrollados o en desarrollo.

El marco del desarrollo sostenible

El marco de desarrollo sostenible es un conjunto de herramientas y pautas para decidir qué tipos de inversiones o acciones se pueden tomar para reducir los impactos negativos que un país puede tener en un medio ambiente global.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible son metas universales que abarcan tanto objetivos sociales como medioambientales. El marco está diseñado para ayudar a los gobiernos, empresas, ONG y otras partes interesadas a alinear su trabajo para el desarrollo sostenible con el de la comunidad en general.

Las empresas utilizan esto como una guía cuando intentan tomar decisiones sobre cómo pueden mantener su éxito a largo plazo y, al mismo tiempo, reducir su impacto negativo en el medio ambiente.

Ejemplos de crecimiento sostenido

Hay ejemplos en los que se puede ver que el pilar fundamental es el crecimiento sostenido de una empresa, puesto que se basan, por ejemplo, en un ahorro energético o en el uso racional de los recursos. Estos también buscan un menor impacto en el medio ambiente. A continuación, se señalan algunos de ellos.

Vivienda sostenible y prefabricada

Hay muchas empresas, como es el caso de Archiblox en Australia, que diseñan casas prefabricadas. Estas viviendas hacen uso racional de la energía en su proceso de construcción. El trabajo de esta empresa evita la tala de más de 6000 árboles, así como la emisión de una cantidad superior a 1000 toneladas de dióxido de carbono.

La firma en cuestión utiliza la energía geotérmica para la climatización de los hogares, así como termopanel para las ventanas. De esta forma, se necesita menos uso de calefacción y aire acondicionado, lo que a su vez deriva en un menor gasto en electricidad.

Además, también pueden hacer uso de tejados ajardinados y un sistema de reciclaje de aguas residuales. Igualmente, cuentan con dispositivos que permiten capturar la luz del sol y usarlo para la vivienda.

Crecimiento sostenible: la agricultura urbana

Este es otro ejemplo de crecimiento sostenible. Gracias a ella, espacios urbanos no destinados a urbanizar pueden destinarse como pulmón verde, sin contar con que en muchos casos esto permite el autoconsumo.

Un ejemplo de un hotel que lo lleva a cabo es el Wellington en Madrid. Se ha convertido en un paradigma de cómo unir ambos conceptos brillantemente. 

No obstante, hay más ejemplos en lo referente a agricultura urbana. La empresa Sky Greens practica el cultivo vertical de hortalizas, y para ello usa un sistema hidráulico con un circuito cerrado para aprovechar mejor el agua. De esta manera, gastan un 5% menos de agua, algo que también reduce la necesidad de usar fertilizantes, sin contar con que la electricidad usada es mínima.

Transporte ecológico: bicicletas y motos

En casi todas las ciudades españolas se pueden ver las bicicletas y las motos de uso comunitario, por decirlo así, que pueden utilizar todos los ciudadanos. Por lo general se trata de un servicio que se paga de forma mensual y que permite usar un transporte que es cien por cien ecológico: bicicletas y motocicletas eléctricas. 

Esta forma de moverse por la ciudad no solo es más económica, sino que también es mucho más sostenible, pues estos medios de transporte no utilizan combustibles fósiles.

Solar Ear

Este es un ejemplo perfecto para ilustrar de qué manera se puede usar la tecnología de forma sostenible. Se trata de audífonos para personas con problemas de audición que llevan baterías recargables, pero con la energía del sol. 

Pero este ejemplo de desarrollo sostenible ambiental va más allá: en los últimos años, esto se ha generalizado para todo el público para uso habitual, y grandes empresas como Philips ya comercializan sus propios modelos.