La igualdad de género y el desarrollo sostenible son conceptos completamente interrelacionados. Es imposible alcanzar el segundo sin el primero.
La meta de conjugar Igualdad de Género y Desarrollo Sostenible
Alcanzar la igualdad de género efectiva es una meta que trasciende todos los ámbitos. Sin duda, lograrla es fundamental e indispensable para cumplir con un desarrollo sostenible. Por ello, se contempla como una cuestión central de la Agenda 2030 marcada por la Organización de las Naciones Unidas.
El objetivo número 5, “Lograr la igualdad de género y empoderar a todas las mujeres y niñas”, es un objetivo transversal a toda la Agenda 2030. Como veremos a continuación, las mujeres sufren una desigualdad en cada apartado contemplado por los ODS. Acabar con el hambre y la pobreza, fomentar el trabajo decente o asegurar una educación de calidad son objetivos que deben contemplarse con esta realidad en mente.
Aún queda mucho camino por recorrer y la pandemia del Covid-19, por desgracia, ha agrandado algunas brechas que estaban presentes anteriormente.
La situación actual de las mujeres en el mundo
Como hemos mencionado, la igualdad de género está aún por conseguir en multitud de aspectos. Algunos de los problemas más graves que existen a día de hoy son:
El número de mujeres que viven en situación de extrema pobreza supera al de hombres. En un estudio de la ONU tomando 89 países como base, existen 4,4 millones más de mujeres que la padecen respecto a los hombres.
Se calcula que 300.000 mujeres mueren cada año por causas relacionadas con el embarazo. Estamos hablando, por tanto, de fallecimientos por causas que serían completamente evitables.
Sobre la escolarización, hay 15 millones de niñas que nunca aprenderán a leer y a escribir, frente a 10 millones de niños. En consecuencia, se producen efectos a largo plazo que aumentan la brecha de género.
Hay muchos más datos que dan una idea del camino que nos queda por recorrer. Actualmente, hay 122 mujeres en pobreza extrema de entre 25 y 34 años frente a 100 hombres de la misma edad. Además, el riesgo de tener carencia de alimentos supera 11 puntos en las mujeres respecto a los hombres.
La igualdad de género, el objetivo 5 de desarrollo sostenible
El objetivo de igualdad de género marcado por la ONU para 2030 se establece en 5 grandes ejes. Son los siguientes:
- Erradicar todo tipo de discriminación
contra mujeres y niñas en el mundo. Esto supone que no existan leyes que vayan contra la igualdad de género en ningún aspecto.- Eliminar todas las violencias
contra las mujeres y niñas en todos los ámbitos. Diariamente, mujeres y niñas de todas partes del mundo son víctimas de la violencia machista. Acabar con la violencia de género es un eje fundamental.- Erradicar los matrimonios infantiles forzados
y las mutilaciones genitales. En definitiva, acabar con todas aquellas prácticas vejatorias y violentas establecidas contra las mujeres. - Valorar los trabajos de cuidados
para que se promuevan las responsabilidades compartidas. La corresponsabilidad en las tareas del hogar se convierte en un apartado fundamental a tener en cuenta, y que en muchas ocasiones es ignorado y menospreciado.- Favorecer la participación de las mujeres
en la toma de decisiones a todos los niveles, económico, político y social. Las mujeres han de ser referentes de poder en todos los ámbitos.- Garantizar el libre acceso de las mujeres a los servicios de salud sexual y reproductiva, para que las mujeres sean quienes decidan si tener hijos y cuándo, teniendo acceso a las herramientas necesarias.
Para conseguir estos objetivos, la ONU indica tres prioridades. En primer lugar, emprender las reformas que garanticen la igualdad de derechos en lo económico y el acceso a la propiedad. El segundo aspecto es facilitar el uso de las tecnologías para las mujeres. Finalmente, la necesidad de aprobar políticas encaminadas al empoderamiento femenino.
Las desigualdades en cada objetivo de desarrollo sostenible
Las mujeres sufren una discriminación sistemática en cada ámbito contemplado en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. A continuación, veremos las desigualdades que existen en cada apartado para tener una idea de la situación actual:
- Fin de la pobreza: por cada 100 hombres de entre 25 y 34 años que viven en condiciones de pobreza extrema, hay 122 mujeres de la misma edad.
- Hambre cero: hasta 11 puntos más separan a las mujeres respecto a los hombres en la probabilidad de no tener acceso a alimentos.
- Salud y bienestar: más de 300.000 mujeres mueren cada año como consecuencia de un embarazo.
- Educación: 15 millones de niñas no tendrán acceso a la escuela primaria.
- Igualdad de género: Existen varios países con discriminaciones legales reales para las mujeres. Hay 49 Estados donde no hay leyes de protección de violencia de género, 39 países con menos derechos de herencia para las mujeres y 18 donde hay una tutela efectiva del marido sobre la mujer. El 19 % de las mujeres de entre 15 y 49 años ha padecido violencia de género en el último año, y hasta un tercio de las mujeres sufrirá violencia en algún momento de su vida. Por otra parte, 200 millones de mujeres han padecido mutilación genital.
- Agua y saneamiento: en aquellos hogares sin posibilidad de acceder a agua corriente, las responsables de recolectar agua en el 80% de los casos son las mujeres.
- Energía asequible y no contaminante: en el año 2012, 6 de cada 10 víctimas de la contaminación del aire en el interior de las viviendas debido al uso de materias combustibles fueron mujeres.
- Trabajo decente y crecimiento económico: La desigualdad salarial en las mujeres es un hecho y esta llega hasta un 30%, en el ámbito de los trabajos domésticos.
- Industria, innovación e infraestructura: Las mujeres que se dedican a la investigación suponen solo el 28,8 % del total. Son muy pocos los países que han alcanzado la paridad.
- Reducción de las desigualdades: un 30% de la desigualdad salarial se produce por la desigualdad dentro del hogar. La probabilidad de que las mujeres se vean obligadas a vivir por debajo del 50% de la renta mediana es más alta respecto a los hombres.
- Ciudades y comunidades sostenibles: falta de recursos para necesidades básicas es uno de los principales problemas que sufren las mujeres en barrios desfavorecidos.
- Producción y consumo responsables: más mujeres que hombres dependen, a día de hoy, del transporte público.
- Acción por el clima: es 14 veces más probable que una mujer fallezca durante un desastre natural respecto a un hombre. El cambio climático tiene, por tanto, un efecto descomunal.
- Vida acuática: tanto mujeres como hombres sufren las consecuencias de la contaminación acuática y marina.
- Vida de ecosistemas terrestres: las consecuencias de perder superficie forestar afectan especialmente a las mujeres en situación pobreza y en zonas rurales.
- Paz, justicia e instituciones sólidas: en cualquier conflicto bélico, las mujeres están expuestas a sufrir secuestros, violencia sexual y tortura.
- Alianzas para lograr los objetivos: en 2012, las asignaciones de fondos de países en vías de desarrollo fueron mínimas para las mujeres.