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Las técnicas de investigación operativa son sumamente útiles para aplicar en el ámbito de la Ingeniería Industrial. Aquí te damos más detalles acerca de esta disciplina y las ventajas que aporta.
La investigación de operaciones es, en síntesis, un método consistente a detectar una problemática organizacional y, en base a ella, proponer las mejores soluciones. Es una metodología científica y, por lo tanto, busca la excelencia en cualquiera de los ámbitos de aplicación que tenga.
A nadie se le escapa que, en el caso de la Ingeniería Industrial, estas técnicas tienen mayor importancia si cabe. No en vano, la resolución de problemas en este ámbito tiene enjundia, y también plantearlos correctamente.
Las etapas de una investigación operativa, para que esta sea exitosa, tienen que seguir un orden cronológico. Es el siguiente:
En primer lugar, se hace imprescindible detectar correctamente el problema. O, dicho de otra manera, el motivo por el cual se inicia la investigación. Esto no significa que, posteriormente, puedan aparecer otras derivadas, pero conviene tener un punto de partida.
Posteriormente, hay que iniciar una labor de recogida de datos lo más completa posible. Afortunadamente, y gracias al desarrollo de las herramientas informáticas, hoy con el Big Data es posible conseguir una información exacta en poco tiempo.
Una vez que tengamos la información, podremos implementar una fórmula matemática o estadística adaptada a lo que necesitamos para inferir varias posibilidades. Y, evidentemente, el paso posterior es realizar distintas simulaciones para ver cuál es la opción que se ajusta a lo que necesitas.
Finalmente, y dados todos los pasos anteriores, ya podrás iniciar la implementación del nuevo modelo. Y, evidentemente, lo harás con grandes probabilidades de mejora para tu organización.
Los beneficios de estas técnicas de investigación para las empresas y organizaciones son múltiples. Por ejemplo, podemos distinguir los siguientes casos:
En consecuencia, si lo que quieres es aplicar una técnica de resolución de problemas y de mejora exacta, esta es una buena opción.
La investigación de operaciones en el ámbito de la Ingeniería Industrial se aplica de varias maneras. Aquí indicamos algunos ejemplos prácticos que te pueden interesar:
En primer lugar, se pueden modelar los problemas, de manera que se estandarizan y se pueden tratar. Si no se conoce exactamente cuál es el problema y sus medidas, difícilmente se podrá solucionar. No se trata solo de saber que hay un problema, sino también de medirlo correctamente.
Por otra parte, la investigación operativa proporciona una metodología de análisis de datos. Esto es fundamental, porque sin la analítica de información no se pueden inferir soluciones. Hoy en día, sin medición del torrente de datos al que se tiene acceso, es imposible hacer un buen trabajo.
Finalmente, esta investigación ofrece un marco para poder plantear soluciones útiles para la organización. Al final, lo que se busca es resolver las problemáticas que se presentan. Y, además, se pueden comparar varias alternativas antes de decantarse por la mejor.
Si pensamos en que el trabajo de quien se dedica a la Ingeniería es optimizar y estandarizar procesos, tanto a nivel individual como organizacional, no ha de extrañar que esta metodología tenga tanto peso.
Existen ya algunos casos en la Antigüedad de uso de investigaciones operativas, como en las Guerras Púnicas entre Cartago y Roma (siglos III-II AC). Sin embargo, hay que señalar que existían numerosas limitaciones por cuestiones técnicas. Lo mismo sucedió en el Renacimiento, o durante la Primera Guerra Mundial.
Sin embargo, la extensión y generalización de este tipo de investigaciones es mucho más reciente. La podemos datar, aproximadamente, en la década de 1980. Algunos ejemplos reales de uso y éxito de estas operaciones son los siguientes:
La CITGO Pretoleum Corp. implementó en 1987 una investigación para mejorar el refinamiento del crudo, así como la oferta, comercialización y distribución de todos sus productos. El resultado fue un ahorro anual de 70 millones de dólares.
La aerolínea American Airlines ejecutó una investigación en 1992 para revisar los precios, sobreventas y coordinar mejor sus vuelos para mejorar las ratios. Como consecuencia de ello, mejoró los ingresos en 500 millones de dólares anuales.
AT&T realizó una investigación que tuvo como resultado la creación de un centro de llamadas (call center) para orientar mejor a las personas usuarias. El resultado práctico de esta investigación, iniciada en 1993, fue una mejora por ahorro de 750 millones de dólares.
En el año 1995, Digital Equipment Corp llevó a cabo una reestructuración de su cadena de suministros, tomando como base una investigación. El ahorro que se generó fue de 800 millones de dólares.
Finalmente, hay que señalar que el Cuerpo de Defensa de la República de Sudáfrica, en 1997, rediseñó su sistema y dimensiones, tomando como referencia la investigación. Consiguió ahorrar 1.100 millones de dólares anuales.
Esto implica que las investigaciones, habituales desde entonces, puede ejecutarlas cualquier organización, privada y pública.
La investigación operativa proporciona un marco de análisis y trabajo a las personas que trabajan en labores de Ingeniería, para resolver problemas planteando soluciones. En consecuencia, hoy es una parte imprescindible para cualquier profesional del sector de la Ingeniería Industrial.