El uso de materiales sostenibles se está convirtiendo en una prioridad para muchos países y sus respectivos gobiernos, quienes impulsan y fomentan su uso en los diferentes sectores productivos. El motivo principal es que se hace imprescindible iniciar acciones contundentes que permitan frenar el impacto negativo que la actividad humana ha provocado en las últimas décadas en nuestro planeta. Por eso, los estudios de Bachelor en Ciencias Ambientales lo tienen en cuenta.
Recordemos que los materiales sostenibles tienen que cumplir los principios básicos de reducción, reutilización y reciclaje. Además, para considerarse sostenible, el material debe proceder de la naturaleza, ser saludable y perdurar en el tiempo. Solo así será posible reducir el efecto nocivo de su producción, uso y reciclaje futuro.
El modo en que los materiales afectan a nuestro planeta puede ir desde el impacto en el entorno debido al modo de producción, su afectación a la salud relacionada con su utilización, hasta su desecho por la mala gestión de residuos. Como individuos todos tenemos responsabilidad en el consumo responsable, su buen cuidado y posterior reciclado.
Y esto se debe tener en cuenta, también, en un modelo de arquitectura sostenible. Por citar algunos, en la actualidad los materiales que más contaminan o afectan al medio ambiente son:
A nadie deja indiferente ver imágenes que nos muestran la contaminación por plásticos en los océanos. La forma en que afecta al ecosistema marino. Además, cabe señalar que el BPA o bisfenol A, presente en algunos objetos fabricados con plástico es muy perjudicial para el ser humano. Medidas para reducir estos efectos devastadores se llevan poniendo en práctica hace años. Del mismo modo, se han creado materiales procedentes de los restos de plástico con el fin de aumentar su reutilización.
Son sin duda el conjunto de materiales que más contamina y cuya gestión más preocupa a los defensores del planeta. Por señalar algunos presentes en nuestros objetos cotidianos: aluminio, cobre y zinc. De nuevo es esencial el control en su fabricación y aprovechamiento. Y también buscar materiales alternativos menos dañinos. En la medida de lo posible, conviene reemplazar estos materiales contaminantes.
Este material empleado durante décadas en la construcción de edificios y techos de uralita ha sido prohibido debido a su impacto en la salud de las personas. El contacto continuado con él puede provocar enfermedades cancerígenas. Se trata de uno de los materiales más dañinos para la salud que sigue aún presente en gran cantidad de edificios.
Con el fin de disminuir la contaminación de nuestro entorno, desde hace años se investigan alternativas de materiales sostenibles para la producción de materiales y la gestión de residuos. De este modo, se han diseñado nuevos materiales sostenibles y también se ha potenciado el empleo de otros que ya existían. Es necesario invertir en investigación y desarrollo para poder garantizar los recursos necesarios para la sociedad actual sin poner en peligro el futuro de sociedades futuras.
Además, es crucial priorizar aspectos como la sostenibilidad respecto a otros como pueden ser el coste o la facilidad de obtención. La concienciación de todos es clave para este cambio.
Hoy en día, por suerte, la mayoría de sectores productivos han incorporado la fabricación sostenible en sus modelos productivos. Así, entre los materiales no contaminantes empleados en sectores como el textil o el de la construcción, se prioriza y fomenta el uso de algunos materiales como estos:
Es importante diferenciar el orgánico de otro tipo de algodón sintético.
Algunas características de este tipo de material son:
Las plantaciones en las que se cultivan no afectan al entorno. No hay que confundir con la viscosa de bambú que sí contamina y perjudica a la salud.
Los motivos principales para escoger este material y no otros:
Este material además de sostenible, al emplearse en la construcción de viviendas logra un aislamiento que puede llegar al 60%, con el ahorro energético que conlleva.
Otros aspectos relevantes para fomentar su uso:
Uno de los materiales con menor impacto ambiental, perfecto para la construcción de viviendas sostenibles.
El por qué de su elección como material de referencia:
Para la Universitat Carlemany, la sostenibilidad es más que propósito, es un compromiso claro con la sociedad, nuestro planeta y el futuro de todos.
Este ha sido el motivo que nos llevó a diseñar nuestro Plan de Acción ODS que compartimos contigo y te invitamos a leer. En él queremos dejar patente nuestro interés decidido a mejorar nuestro entorno y convertirlo en un lugar mejor para todos. Estamos seguros de que te tenemos de nuestro lado y eso es todo un éxito.