es
Todos hemos oído hablar de la electricidad verde. Este tipo de electricidad es la que se produce a partir de fuentes renovables, como, por ejemplo, las energías eólica, solar e hidráulica. Su principal característica es que el impacto medioambiental que genera es mucho menor que los tradicionales combustibles fósiles. Contar con la energía verde es fundamental para poder diseñar ciudades con energía limpia.
Esto no significa que la generación de la energía no tenga impacto, pero sí que lo tienen considerablemente menor. Además, las fuentes de energía de las que se obtienen son ilimitadas, algo que cuando se usa para generar electricidad, la obtenida es electricidad verde.
Gracias a los últimos avances en las tecnologías de energías renovables, hoy en día, la electricidad generada por ellas ha aumentado considerablemente.
En la actualidad, todas las naciones del mundo están viendo cómo la naturaleza, y, por tanto, la calidad de vida futura para sus ciudadanos puede estar en peligro. Por esta razón es fundamental comenzar un camino hacia un concepto diferente, la sostenibilidad. Y en este sentido, la electricidad verde es un aliado imprescindible.
De hecho, la Agencia Internacional de la Energía Renovable mostró un crecimiento muy importante de este tipo de electricidad en sus Estadísticas de Capacidad Renovable 2020. En este documento se refleja que el año pasado las energías verdes supusieron el 72% de la expansión energética que se produjo.
Los datos recogidos afirman que la electricidad verde creció en un 7,6%, con una capacidad de 176 GW.
Hacer un uso de la electricidad que se obtiene de manera convencional puede contribuir a que se fomente la contaminación de la atmósfera, y a que haya más emisiones de gases. Sin embargo, según la United States Environmental Protection Agency (EPA), pivotar hacia la electricidad verde puede ayudar mucho a mejorar cómo se obtiene la electricidad.
Además, según esta organización, la electricidad verde tiene muchos beneficios, entre los que se encuentran los que se señalan a continuación.
Además, para las empresas también hay beneficios, como, por ejemplo, que su uso les permite diferenciarse como una empresa con conciencia medioambiental.
Las investigaciones y los estudios que se realizan muestran un continuo incremento en el catálogo de energías renovables de las que se puede obtener la electricidad verde.
Aquí señalamos las fuentes de energía renovable más habituales.
Esta energía se genera con el uso de células fotovoltaicas que convierten la luz en electricidad verde. Se puede afirmar que es el tipo de energía más disponible en el mundo. Es inagotable, y la electricidad obtenida se puede usar en muchísimos ámbitos diferentes.
Esta energía tiene un gran potencial, puesto que nuestro planeta recibe mucha más de la que gasta.
El poder del viento es lo que convierte la energía eólica en electricidad verde. Las instalaciones se suelen colocar en lugares altos y cerca de la costa.
Según los datos publicados en Proceedings of the National Academy of Sciences, una red de turbinas eólicas de dos megavatios y medio trabajando solamente al 20% de su capacidad, podría proporcionar 40 veces más del consumo de energía que se hace en el mundo.
Las turbinas de agua se han utilizado para proporcionar electricidad durante más de 100 años, y hoy en día producen alrededor del 2% de la electricidad de Gran Bretaña. En ella, es el movimiento del agua lo que genera dicha energía.
Una de sus ventajas es que es continua; no se interrumpe, como ocurre, por ejemplo, con el viento o con el sol.
Debajo de la corteza de la Tierra hay una cantidad ingente de energía térmica. Dicha energía se origina con la formación del planeta y con la desintegración radioactiva de la materia mineral. La energía geotérmica es una fuente renovable para producir electricidad verde de forma muy efectiva.
Sin embargo, es de las energías renovables menos conocidas, y España no es una excepción.
La electricidad verde es una obligación para todos aquellos países que quieran apostar por un futuro sostenible en sus ciudades y para sus habitantes. La necesidad creciente de adoptar posturas comprometidas con la sostenibilidad hace más necesaria que nunca este tipo de electricidad, obtenida a partir de las energías renovables.
Es imprescindible contar con verdaderos profesionales que sean capaces de implementar esas técnicas para conseguir la electricidad más limpia posible. Solamente así se conseguirá reducir la huella y el impacto de la generación de esa electricidad en el medio ambiente.